Este genial libro de Lewis Carroll (seudónimo del escritor Charles L. Dodgson) no tuvo éxito en su época porque en la puritana época victoriana todos los cuentos infantiles debían tener moraleja. Alicia en el país de las maravillas carece de moralejas pero el tiempo le ha hecho justicia en lo que a reconocimiento se refiere, convirtiéndose en un clásico de la literatura y un interesante laberinto lingüístico. Y es que esta novela se disfruta por partida doble: una historia y personajes deliciosos, estrambóticos, divertidísimos, y un constante y seductor juego de palabras tan ingenioso que invita a ser releído al cabo de los años. Escenas tan memorables como la ceremonia del té, el partido de criquet o una merienda de locos forman ya parte del imaginario de los adultos.
Lector, vuelve a abrir esta gran historia para reencontrarte con el gato de Cheshire, el Sombrerero Loco o la temible Reina de Corazones y acuérdate de que podrás merendar con ellos mermelada siempre que sea mañana.
Hemos ido a ver Alicia en el país de las maravillas de Tim Burton y nos ha encantado. Pese a que me gusta el trabajo de Burton, tenía mis reservas sobre cómo iba a tratar al gran clásico de Lewis Carroll, sobretodo porque se trata de una obra victoriana, muy alejada de la filosofía Disney que iba a controlar la producción del director. Pero lo cierto es que me ha sorprendido gratamente. La película recoge a una Alicia que ya ha crecido y que regresa de nuevo al País de las Maravillas. Los personajes son fieles a las dos novelas originales (increíbles los hermanos Tweedle) y el espíritu del mundo creado por Carroll sigue ahí, intacto, delicadamente respetado y adaptado por Burton. Además, la película ha sabido captar y trasmitir las pinceladas oníricas y el punto cruel y morboso de algunos personajes. Creo que a Lewis Carroll le hubiese gustado esta película, un homenaje extraordinario para un clásico de la literatura con gótico paisaje burtoniano de fondo.
Bueno, bueno, bueno, ni tan bien, ni tan mala como la ponen en algunos sitios, a mi personalmente me ha encantado; pensada, refinada, lógica, analítica, etc. Pero no pasa de ser una vuelta de tuerca sobre si misma al país de las maravillas, que por desgracia ha dejado de estar loco, de estar poblado por oníricas bestias y flora locuaz.
Echo en falta ese pais de las maravillas, pues si, por desgracia lo echo en falta porque el puto Burton, antes de ese desenlace a lo crónicas de Narnia, tiene los santos cojones de enseñarte a la niña en sus anteriores viajes, y joder, que cabrón, me encantan esas imágenes oníricas mas que lo que he visto durante la hora y media.
Sobre los personajes, la verdad es que no son complicados, pero desde luego, la reina Roja se ha ablandado, y el sombrerero loco parece afectado de una sobredosis de litio, mientras que la Liebre parece que lleva una de cafeína, y el conejo ha dejado de ser un histérico del tiempo para pasar a una mera comparsa. Eso si, la "deliranza", sublime! aunque sea en CGI.
Una pena, que pasa en Disney?, no podemos hacer una adaptación de los libros?, teníamos que hacer esta revisión?
Yo no estoy tan seguro que a Lewis le gustase, quizás diría como Antonio Gala sobre "La Pasión Turca": "esta no es mi Desideria/Alicia"…
Sí que es cierto que el final es un poco a lo Narnia y que se echa de menos un mayor protagonismo del conejo blanco, al fin y al cabo, en los libros de Carroll tenía un protagonismo más marcado incluso que el del sombrerero. De todas formas, la caída de Alicia por el agujero es muy buena, muy acorde con las ilustraciones originales de época victoriana. Y no sé, existen unas 10 adaptaciones cinematograficas de Alicia, quizás por eso Disney ha decidido no limitarse a hacer otra más.
Por cierto, como te oiga la Reina Roja diciendo esas cosas de ella que sepas que… Te va a cortar la cabeza!!!!
Traedme un Cerdo!!!