En 1603, tras la muerte sin descendencia de la última reina Tudor, Isabel I, fue Jacobo Estuardo quien heredó el trono de Inglaterra. Hijo de María I de Escocia, había sido nombrado rey de Escocia durante su primer año de vida, por lo que pasó a la Historia como Jacobo VI de Escocia y I de Inglaterra y de Irlanda. Solo dos obsesiones tenía el nuevo rey inglés: perseguir la brujería y erradicar el catolicismo de sus tierras. Y a ambas se entregó con pasión, llegando algunas veces a parecerle lo mismo una misa negra que la santa misa. Sin embargo, no le fue demasiado bien en sus primeros años de reinado, pues en 1605 tuvo que lidiar con la Conspiración de la pólvora —un grupo de activistas católicos liderados por Guy Fawkes atentaron contra el Parlamento con el objetivo de asesinar a Jacobo y a la aristocracia protestante— y en 1612, los procesos contra las brujas de Lacanshire —probablemente un montaje para descubrir y procesar a los católicos que se ocultaban en la región, algunos prófugos de la Conspiración de la pólvora.
«Es imposible caminar por aquí y sentirse solo. Quienes han nacido en este lugar están marcados por Pendle. Comparten una marca común. Todavía pervive la tradición, o la superstición, de que las niñas nacidas en Pendle Forest son bautizadas dos veces: una en la iglesia y la otra en una poza negra al pie de la colina. La colina las conocerá entonces. Serán su trofeo y su sacrificio. Ellas deben aceptar el derecho derivado de su nacimiento, sea cual sea su significado.«

En La mujer de púrpura, Jeanette Winterson novela el proceso por brujería más famoso de Inglaterra: los juicios de las brujas de Lancashire. Entre abril y agosto de 1612 fueron quemadas en la hoguera ocho mujeres acusadas de practicar la brujería, entre ellas, Alice Nutter, una hermosa y rica viuda, comerciante de paños, alquimista y discípula del doctor John Dee. Avisa Winterson en el prólogo que, pese a basarse en hechos reales, su novela no deja de ser una aproximación ficticia con elementos sobrenaturales. Aunque lo cierto es que ha reflejado magníficamente el clima político y religioso de la época y ha sabido sacar partido al mayor misterio de los documentos originales: ¿por qué una mujer educada y rica como Alice Nutter fue juzgada y quemada junto a la chusma de Lancashire?
Con la inteligencia que la caracteriza, Jeanette Winterson entrelaza muy bien la recreación de personajes y hechos reales con una trama sobrenatural apasionada y muy bien ambientada en la Inglaterra de principios del siglo XVII. Destaca el perfil brutal de los cazadores de brujas y la bestialidad en la que vivían los más miserables de la sociedad, que contrasta terriblemente con una Inglaterra isabelina, época dorada de la literatura y el teatro. La autora pone de relieve ese equilibrio continuo entre ciencia y superstición, entre magia y religión, pero sobre todo consigue hechizar al lector en una narración oscura y a menudo escalofriante. La mujer de púrpura es una novela gótica y de misterio sobrenatural, con una prosa precisa y brillante, y una atmósfera envolvente como la niebla del crepúsculo en el bosque de Pendle. Sus personajes, escenas y hechos documentados te dejan helado, y no puedes dejar de pensar que probablemente la realidad fue mucho peor que la ficción.
Lector, atención al divertido cameo de William Shakespeare.
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Hola guapa, pues aunque me gusta mucho la época, lo de la caza de brujas es algo que no me llama tanto la atención… Aún así le daré una vuelta.
Un besazo
Si te gusta Jeanette Winterson te encantará y si no la has leído todavía, me parece una buena puerta de entrada para hacerte una idea de su estilo y escritura. Yo creo que te gustará, por el punto sobrenatural y… por todo!! jajajaja. Besos.
Ains, Mónica, me lo llevo de todas todas, porque además lo tenía en el punto de mira desde hace un montón de tiempo. Viendo lo que te ha gustado, me reafirmo en leerlo.
No sé si te lo he comentado alguna vez, pero me apasiona todo lo relacionado con las brujas y juicios por brujería, hasta el punto de que a veces se me pasan por la cabeza tonterías tipo «voy a tirarme un mes reseñando solamente libros sobre brujas/brujería». Y algún día lo haré, al tiempo… porque los tontos hacen tonterías (xD). Además es que me encantó el estilo de Jeanette Winterson cuando leí «Días de Navidad», así que tiene todas las papeletas de que lo voy a disfrutar un montón.
¡Besote!
Uy, sabía que te gustaría aunque pensaba que ya lo habrías leído porque poco escapa a tu extraordinario radar brujeril ;-) Coincidimos en ser muy fans de los cuentos de Winterson de «Días de Navidad» y en lo de las brujas, así que no te insisto porque sé que este libro es para ti. Además está basado en hechos reales, en los juicios de Lancashire, y sale Shakespeare ¿qué más se puede pedir? Besotes.
Interesante periodo histórico. Me recuerda a la serie «Outlander», a la parte que transcure en el pasado, aunque esta transcurre un poco más adelante, a mediados del XVIII.
No he leído nada de la autora y tomo nota de esta novela.
Un beso.
Para esta novelización histórica tienes que ubicarte al final del período isabelino, con la llegada del rey Jacobo Estuardo y sus obsesiones por asesinar católicos y brujas (a menudo confunde ambas cosas y le da igual puesto que para él ambos son peligrosos y deleznables). Seguro que te hace tilín ;-) Besos.
Hola!
Me encanta lo que cuentas, me lo llevo bien apuntado :)
Es un librito estupendo y además es una buena oportunidad para leer por primera vez a Jeanette Winterson, si es que no lo has hecho ya :-) Besos.
Muchas veces he tenido este libro en la mano y ha vuelto a su sitio en la biblio. Me encanta Jeanette, me gustan mucho las historias de brujas y sobrenaturales pero me da miedo asistir a interrogatorios y calamidades y por eso con el tema brujas me echo para atrás casi siempre. La verdad es que me has vuelto a tentar. Le echaré otro vistazo.
Besos
Uish, torturas hay, no te voy a engañar, y escenas morbosillas, también. Incluso una profanación de tumbas. Pero es que fue así, está basado en hechos reales y documentados y tú ya sabes cómo era ese momento histórico: que sí, que teníamos el florecimiento literario isabelino, pero también a un rey obsesionado con quemar gente en la hoguera. Si te animas, me cuentas. Besotes.
«Las malditas» de Stacey Hall es una ficción histórica ambientada en esta misma caza de brujas. La autora debuta con esta novela.