Vida de un bribón, de Wilkie Collins

Francis Turner, nieto de Lady Mortimer e hijo del doctor Turner, tiene muy claro que no hará algo tan grosero como ganarse el pan con el sudor de su frente, pero como le gusta la buena vida no le queda otra que recurrir a su ingenio para salir adelante. Estudiante de medicina, caricaturista, pintor de retratos, falsificador de Rembrandt, secretario de la Sociedad Científica y Literaria de Duskydale,… Francis prueba fortuna en las más diversas ocupaciones, pero su talante de bribón lo conduce por caminos de lo más excéntricos. Hasta que un codicilo en el testamento de su tío y el flechazo que siente por la bella Alicia lo empujan hasta una peligrosa situación de final incierto.

«Tengo tres hijos: el mayor lo consagré a la iglesia. Está muy contento, pero mantenerlo me cuesta trescientas libras al año. El segundo se lo entregué a la justicia: asegura que todo le va viento en popa, pero me cuesta cuatrocientas libras esterlinas al año. El tercero se ha dedicado a los bailes de salón. Se ha casado con una rica heredera y no me cuesta ni un centavo.«

Descubrí esta novela corta de Wilkie Collins gracias a la reseña de Mrs Hurst, gran devota del autor victoriano, en Las Inquilinas de Netherfield, que la tildaba de divertida y alegre, justo un reflejo del buen momento que pasaba Collins mientras la escribía: en París, con su amigo Charles Dickens de vecino. Disfruto muchísimo con el sentido del humor de Dickens, pero como no recordaba que Wilkie Collins se prodigara en socarronería victoriana, allá que me fui a la librería a echarle un ojo a Vida de un bribón y, efectivamente, es muy divertida y desenfadada, sobre todo la primera parte, en la que el protagonista explica en primera persona sus peripecias más o menos delictivas por el Londres de la época.

Vida de un bribón se publicó por primera vez por entregas, en 1856, en la revista Household Words, que dirigía Charles Dickens, pero a diferencia de otras novelas por entregas de Collins, esta resultó una historia corta. El libro tiene dos partes bien diferenciadas: una primera, muy humorística, en la que el protagonista relata sus estrambóticas desventuras para vivir bien sin trabajar —atención a su paso por la prisión de deudas y a las lecciones de moralidad del caballero Webster— y una segunda que deja algo atrás ese tono de comedia y se convierte en una historia de policías y ladrones, con persecuciones, fugas y cierto suspense. El final aventurero de la historia podría haber dado para muchísimos más capítulos, pero, para tristeza de esta lectora, Collins decidió no continuar y hacernos un resumen; eso sí, el final es magnífico, a la altura de la catadura de Francis Turner. Sin duda, es una lectura que os recomiendo mucho, sobre todo si es la primera vez que leéis a Collins y os da un poco de pereza, o si os apetece conocer otra faceta del autor algo distinta a la de sus más famosas sensation novels.

Lector, no te pierdas la joie de vivre de Wilkie.

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Vida de un bribón

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19 respuestas a Vida de un bribón, de Wilkie Collins

  1. Nitocris dijo:

    Hola Mónica, me gusta mucho Collins. Ya leí La dama de blanco, La piedra lunar, y Armadale en lectura conjunta con Susurros y Anabel Samani (por cierto, veremos tu reseña de Armadale?:)). Así que este me lo apunto, ya tengo varios más de Collins en el kindle.
    Un besazo

    • Monica dijo:

      Este es un Collins más cortito (para lo que nos tiene acostumbradas), pero sabiendo que eres fan del autor, seguro que te va a gustar muchísimo. La reseña de «Armadale» lleva una semana escrita, pero es que no me acaba de gustar. Ya sabes lo que pasa, cuánto más disfrutas de un libro, más difícil es hacerle justicia. Y además, cuando son clásicos de este calibre… Y la reseña de Anabel me dejó boquiabierta, ¡la mía no le llega ni a la suela de los zapatos! Pero como sabes que hago el reto de Todos los clásicos, tendré que publicarla XD Besos.

  2. Rosa Berros dijo:

    He leído varias novelas de Wilkie Collins y todos me han gustado mucho. Tomo nota también de este. Esa cita que resalta acerca de los tres hijos es buenísima y es que el autor tenía una mirada muy certera y afilada sobre la sociedad de su época.
    Un beso.

    • Monica dijo:

      Cierto, uno de los grandes placeres de leer a Wilkie Collins es que, como también sucede con Dickens, nos ofrece un retrato pormenorizado y agudo de la sociedad de su época. Seguro que también disfrutas mucho de esta obrita, más corta y divertida. Besos.

  3. Margari dijo:

    Yo con este autor empecé por sus grandes novelas, absolutamente maravillosas. Esta no la conocía así que tomo buena nota.
    Besotes!!!

    • Monica dijo:

      Es cierto que sus obras más famosas son las monumentales «La piedra lunar» o «La dama de blanco», y «Armadale» también es un tocho fabuloso. Pero esta novela breve y divertidísima me parece estupenda para iniciarse con el autor. Besos.

  4. Esther dijo:

    Lo leí hace unos meses y me encantó. Ha sido además el primer Collins que he leído.

  5. Roberto dijo:

    Hola Monica, por fin puedo volver a visitar tu blog después de unos meses de ausencia.
    Quisiera preguntarte si tienes buena relación con la novela negra (yo me estoy iniciando, solo llevo 2 leídas) y en caso que te guste, cual podrías recomendarme. Dicen que la escandinava es bastante buena.
    Te mando un saludo a ti y a tod@s los lect@ores y espero poder comentar más seguido.
    Besos!!.

    • Monica dijo:

      Bievenido de nuevo, Roberto. Pues no suelo leer novela negra, pero si te apetece leer autora nacional te recomiendo mucho «Vienen mal dadas» y «En la sangre» de Laura Gomara. Ya me contarás si te animas. Besos.

  6. Me parece interesante Mónica. Voy a tenerla en cuenta. Besos :D

  7. Norah Bennett dijo:

    Hola. Y yo todavía ando con el señor Wilkie pendiente, que pensaba empezar con sus más conocidas obras tipo La piedra lunar o La dama de blanco. Pero me ha hecho mucha gracia lo de que trabajar para ganarse el pan es una ordinariez, es verdad, no tiene clase ni glamour esa opción. Con el humor me llevo regular pero creo que este podría ser del tipo que me gusta. Ya le había echado el ojo en Inquilinas, la tendré más en cuenta. Por cierto, yo también quiero un Dickens de vecino. Qué injusta es la vida.
    Besos

    • Monica dijo:

      En esta novela encontrarás una primera parte más humorística y una segunda más policíaca, ahí lo llevas. Lo cierto es que si no has leído antes a Collins igual te viene bien empezar por aquí antes de atreverte con sus tochos… aunque sé que a ti eso no te da miedo. Besotes.

  8. MH dijo:

    Ay, Mónica, la de tiempo que hacía que no comentaba por aquí… leer te leo, pero ya sabes cómo me va la vida. Nada, que me alegro muchísimo de que te animases con el libro (doblete de Wilkie al tiempo, por cierto, no todos los autores salen bien de esa «sobredosis»… jajaja) y de que lo hayas disfrutado. Y sí, es lo que comentaba en mi reseña, tiene como dos partes muy diferenciadas, la primera muy divertida, que además se nota lo bien que se encontraba el autor en su vida personal en ese momento, y otra con más misterio y en un tono algo diferente. El resultado para mí es de un absoluto divertimento. Lástima de edición, una vez más… pero bueno, el genio de Wilkie puede con todo :)

    ¡Besote!

    • Monica dijo:

      Ya sabes que este me lo compré en cuanto leí tu estupenda reseña, pero se me había olvidado lo de la traducción y me llevé una lamentable sorpresa. Sí, me arriesgué al alternarlo con «Armadale», pero son lecturas tan distintas que lo llevé genial y el bribón me servía para bajar la tensión de los últimos capítulos de los Allan ;-) Un besote grande.

  9. Hola, Mónica:
    Esta no la he leído, pero le pondré remedio: humor, un poco de suspense y Collins… una mezcla que suena perfecta :-)
    Un beso y feliz semana.

  10. Ya lo había visto anteriormente y me lo trajiste a la mente, creo que es idóneo para esos momentos entre libros densitos… Me gusta Collins, al menos lo poco que he leído de él: La dama de blanco, La piedra lunar y algún relatillo, todo me ha convencido mucho, especialmente La dama de blanco. Sé que regresaré a él, tengo una edición que incluye varios relatos suyos esperándome (La dama de Glenwith Grange se llama, lleva el nombre de uno de los relatos) y eso será lo siguiente que lea de él, pero no descarto hacerme con este título del que hablas, sé que también puede ser de mi gusto. Un abrazo.

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